
Pero lo más interesante de este barco el el sistema que fue instalado para evitar que la gente le tome fotografías. No se trata de una cubierta que tapa al yate, sino de un sistema de lásers que barren los alrededores y al detectar un sensor CCD, que usan la mayoría de las cámaras digitales, dispara un rayo de luz a la cámara para echar a perder cualquier intento de fotografía, por este motivo una cámara análoga no tendría mayor problema en sacarle fotografías.
Actualmente se debaten la legalidad de destruir fotografías remotamente además de que se estudian las implicaciones médicas que podrían afectar al fotógrafo al recibir un haz de luz láser a sus ojos.
