La gran mayoría de los centenarios en Japón, un 86,5 por ciento, son mujeres, según ese estudio, recogido por la agencia local Kyodo.
Para mediados de setiembre habrá en el archipiélago nipón un total de 40.399 japoneses centenarios, el doble que hace solo seis años, indica el informe.
“Gracias a la mejora de las condiciones económicas y el progreso en la asistencia médica, el número de personas ancianas ha aumentado constantemente y la población del país ha pasado a disfrutar de una gran expectativa de vida”, indicó un portavoz del Ministerio.
La centenaria más anciana tiene 114 años y habita en la isla de Okinawa (sur), mientras que el hombre más viejo, Jiroemon Kimura, suma 112 años y reside en Kioto.
Antiguo empleado de correos, Kimura, que tiene 20 bisnietos y nueve tataranietos, cree que el secreto para alcanzar un siglo de edad está en “comer cantidades modestas sin hacerle ascos a nada”.
En los últimos años, la mejora de los tratamientos y cuidados médicos en Japón, uno de los países más envejecidos del mundo, ha permitido reducir las muertes asociadas a enfermedades cancerígenas, cardíacas y los derrames cerebrales, consideradas las tres principales causas de muerte en el país asiático.
Según datos de la ONU, el 20,1 por ciento de la población nipona tiene más de 65 años, porcentaje que se espera aumente hasta el 31,3 por ciento para el año 2030.

