Nada más lejos de la realidad. Un día después de que se anuncie la noticia, sabemos la verdadera razón: Google Wave. Como el resto de desarrolladores del mundo, una buena parte del tiempo dedicado a la nueva golosina de Google lo han malgastado en hacerlo compatible con Internet Explorer. Lo curioso es que, en vez de aplicar parches y romperse la cabeza, han decidido que lo más rápido era olvidarse del motor de Internet Explorer, meterle el de Google Chrome y, a otra cosa, un navegador menos del que preocuparse.
La primera vez que visitemos Google Wave nos saldrá un aviso que nos dirá que no podemos utilizarlo a no ser que instalemos este complemento o que usemos otro navegador. Mientras tanto, el soporte para Chrome, Safari y Firefox se sigue manteniendo, ya que estos navegadores tienen las herramientas suficientes (Javascript y HTML5) para hacer realidad el servicio de Google.
Hay que aclarar que no solo estamos hablando de IE6, sino de también todas sus versiones posteriores. Da igual qué versión tengas de Internet Explorer, no lo van a soportar salvo con este plugin. Además, en un futuro es posible que otros servicios web avanzados de Google también necesiten de este plugin, aunque habrá que ver qué tal se desarrolla para que se atrevan a dar el paso.
Otro punto importante es que una vez instalado Chrome Frame, todas las páginas seguirán usando el motor de IE. Las únicas que utilicen ese motor de Google son las que lo pidan explícitamente en el código. Con esto se explica perfectamente que Chrome Frame sea una herramienta que sirve a Wave, y no un intento de canibalizar a Internet Explorer. Por eso no van a anunciarlo excepto en las páginas que lo necesiten.
Por el punto anterior, aunque consigan instalarlo en todos los navegadores, el motor de Internet Explorer seguiría usándose para el 99.99% de las páginas web. La cuota ganada sería ridícula ya que depende de las páginas webs, y está claro que eso no es lo que busca Google. De hecho, ya tenían pensado crear un plugin para IE que añadiera solo algunas de las características de HTML5 que necesita, pero parece que hasta en ese caso la ejecución de Javascript seguiría siendo tan lenta que su uso sería penoso.
En definitiva, resulta extraño comprobar hasta qué punto se han cansado de Internet Explorer los desarrolladores de Google. Es decir, ha llegado un punto que prefieren escribir un navegador antes que tener que escribir una página para otro navegador. Si sos o fueras un diseñador de páginas web ¿No hubieras hecho lo mismo si tuvieras la "fuerza" de Google?
